¿Qué es la crianza positiva?
La crianza positiva es un enfoque basado en el respeto, la empatía y la educación emocional.
Basado en la teoría del apego, la disciplina respetuosa y el desarrollo infantil. Se enfoca en la conexión entre padres e hijos, promoviendo un entorno seguro y estimulante.
Su objetivo es guiar a los niños con afecto y límites claros, fomentando su autonomía y bienestar emocional.
¿Cuáles son sus principios?
1. Vínculo afectivo y seguridad emocional
Los niños necesitan sentir seguridad y amor para desarrollarse plenamente. El apego seguro favorece la confianza y el aprendizaje.
Por lo que es recomendable dedicarle tiempo de calidad, validar sus emociones y responde con empatía. De esta forma se sentirá escuchado y más allá de la norma establecida, pudo conectar con la persona, no sintiéndose juzgado ante su sentir.
2. Disciplina basada en el respeto y la enseñanza
En vez de hablar de castigos, mejor demos consecuencias lógicas. La disciplina positiva busca guiar con amor y coherencia. Es necesario tener normas claras y reforzar las conductas positivas.
Por ejemplo: si no hizo la tarea, en vez de solo quitarle su juego o tablet, deberá terminar su tarea siendo ella su responsabilidad así sea que ello le quite tiempo para jugar
3. Comunicación efectiva y escucha activa
La forma en que hablamos a nuestros hijos influye en su autoestima y conducta. Por lo que debemos de estar frente a frente y mirarse a los ojos, dentro de lo que sea posible.
Usar frases afirmativas, como “me alegra que hoy casi hayas terminado toda tu comida” en vez de “nunca acabas tu comida”. Recordemos validar sus emociones y fomentar la confianza.
4. Desarrollo de la autonomía y autoestima
Desde pequeños, los niños deben aprender a tomar decisiones y ser independientes.
Por lo que debemos de darle la oportunidad de elegir, para ello se le dará opciones que estén dentro de nuestras posibilidades, siempre habiendo un límite.
Como permitirles la ropa que ponerse, habiéndole dado 3 opciones. O elegir si desea empezar con sus que haceres dentro de 5 minutos en ese mismo momento.
5. Regulación emocional y manejo de conductas desafiantes
Es clave enseñarles a identificar y gestionar sus emociones sin represión ni explosiones. Recordemos que como adultos somos su modelo, y esta esperando nuestras reacciones para saber como es que se debe reaccionar, ya sea en ese momento o entro momento repetirlo.
Podemos apoyarnos con técnicas de respiración, cuentos psicoeducativos sobre las emociones.
Actividad recomendada: Diario de gratitud familiar
Cada noche, invita a tu hijo a mencionar algo bueno del día. Esto refuerza su seguridad y bienestar emocional.
Fuente: Faber, A., & Mazlish, E. (2012). Cómo hablar para que los niños escuchen y cómo escuchar para que los niños hablen. HarperCollins.
Fuente recomendada: Bowlby, J. (1988). A secure base: Parent-child attachment and healthy human development. Basic Books.
Lic. Karina Canchanya – Psicoterapeuta